Meditar diferente
Me cuesta meditar. Y seguro que no soy la única. Es un hecho que no soy la única. He tenido muchas conversaciones con amigos y conocidos, he escuchado varios episodios de diversos podcasts sobre la importancia de la meditación y las dificultades que experimentan las personas para lograrlo. La meditación es una actividad casi absurda. La mente no se calla nunca, casi que ni dormida. ¿Cómo lograr que se calle escuchando la música, por más relajante que fuera? Ni la meditación guiada a menudo sirve. Esa menos, si estamos pensando sobre lo que nos está diciendo la tía o el tío que nos está guiando. Pero yo sigo intentando. Lo que he descubierto es que entre más conectada estoy a mi parte subconsciente intuitiva, menos me cuesta meditar. Por eso intento ayudar a las personas de tener mejor comunicación con su lado mágico.
Nosotros somos criaturas mágicas. Somos seres todopoderosos, unos verdaderos super héroes. Pero no nos lo creemos. Caminamos por la tierra apenas arrastrando los pies como lagartijas cuando tenemos unas alas poderosas para volar. Un avión tiene ruedas y tiene alas. Cada uno de estos tiene su objetivo y sirven en un determinado momento. Las ruedas son para ayudar en el despegue y aterrizaje y las maniobras dentro de aeropuertos. Las alas son para cumplir el propósito principal de aeronave, de dominar los cielos y cruzar los océanos. No creo que podamos usar un avión de 350 pasajeros para que nos lleve de un lado de la cuidad al otro a cenar o que nos lleve a Australia por tierra o flotando. Aun que pueda. De igual manera nosotros tenemos ruedas y alas. Las ruedas son nuestro celebro y mente terrenales, las alas es nuestra subconsciente y la conexión con lo divino. La mente nos ayuda a resolver lo de día a día, lo de la realidad limitada. Nuestra intuición y mente subconsciente nos llevan a volar, a cumplir nuestro propósito de alma, de crear, de vivir la vida plena, de no sofocarnos en la mundanead, de despegarnos de la tierra, de desafiar la gravedad.
¿Y eso que tiene que ver con la escritura, diseño y Feng Shui? Mucho. Tiene una relación directa de hecho. La escritura es una actividad intuitiva y subconsciente al 100%. Practicando la escritura intuitiva es como ir al gym de la intuición, a crecer el músculo de la divinidad. El diseño consciente con el entorno, el diseño intuitivo conectado con las necesidades energéticas de alma y la ciencia antigua de Feng Shui nos ayudan a tener un entorno energético correcto y propicio para que nuestra intuición y la mente subconsciente se fortalezcan. Un entorno correcto ayuda a desarrollar y mantener nuestros poderes de super héroes. En otras palabras nada se hace de pasar la mañana en el gym y llegar a la casa donde no hay comida saludable, donde el refrigerador y la dispensa están llenos de basura comestible.
El Feng Shui es sumamente elemental y extremadamente complejo al mismo tiempo. Elemental porque es intuitivo y complejo porque es intuitivo. Hay que desarrollar y entrenar la intuición para poder aplicar el Feng Shui exitosamente. Sin embargo existen reglar básicas.
- El equilibrio de los cinco elementos : Agua, Metal, Madera, Fuego y Tierra. Cada objeto en tu casa pertenece a uno principal y por lo general varios elementos secundarios según su color, forma, textura y material de cual está hecho. Su equilibrio es crucial.
- El equilibrios de las energías en cada espacio según la ubicación geográfica, elementos que se encuentran cerca, las entradas de aire y luz, la altura de los cielos, etc. Los espacios con la energía natural muy rápida hay que calmarlos, y los de alergia estancada, lo contrario, avivar.
- El equilibrio de las energías de los espacios según el uso. La energía de una oficina de trabajo jamás será igual a la de un dormitorio, una estancia o una cocina.
- Trabajo energético en en el espacio según las necesidades del habitante: si busca una pareja o desea tener hijos; si necesita un cambio de trabajo o quisiera viajar más. Tu hogar debe reflejar las necesidades y deseos de tu alma, no ir al contrario de ellos.
- Orden y limpieza energética, en crucial eliminar los objetos tóxicos del espacio.
Lo ideal que contrates a un especialista para el trabajo pero si tienes una intuición bastante desarrollada puedes hacer el Feng Shui básico tu mismo.
La escritura es otra herramienta que te ayudará despertar tu parte mágica de super humano. La escritura intuitiva tiene ciertos principios básicos que es mejor aprender con un mentor o a través de una clase maestra en línea. Pero también, como todo, se puede aprender haciéndolo, sobre todo si tu intuición te empujó hacia eso en primer lugar. Nuestra intuición nunca se equivoca. Si nos llama a hacer o probar algo, hay que hacerle caso. Así yo empecé a escribir a los 50 años y de una manera casi mágica ya he publicado 4 libros y no pienso parar.
Los principios básicos para empezar a escribir son:
- Decida primero si vas a escribir a mano o en la computadora. Las dos cosas son válidas, es cuestión de comodidad y costumbre.
- La practica hace maestro. Cuando vas a iniciar debes escribir todos los días sin falta al menos por 60 días. Es para crear un hábito.
- Escoja una hora del día donde puedes estar solo, sin interrupciones y en un ambiente propicio para que tu mente esté desconectada. Apaga tu móvil y cualquier otro distractor.
- Haz una pequeña meditación antes de empezar. Cierra tus ojos, concéntrate en tu respiración, busca una posición cómoda, toma la consciencia de tu cuerpo y en donde se encuentra tu mente, invítala al espacio delimitado por el espacio de la escritura.
- Abra los ojos, mira al rededor, detén tu vista en lo primero que te llame la atención. Empieza a escribir. Sin escoger las palabras o frases, sin pensar, sin detenerte, solo apunta todo lo que te sale. Sin pedir que tenga una forma, que este lindo o ordenado. Nada de eso importa. Solo escriba. Por unos 10-15 minutos. No tienes que leer lo que escribiste.
¿Estás sorprendido de lo que te salió? Seguro que sí. Con cada día te vas a sorprender más y más. Tu mente subconsciente te va a sorprender y tu intuición va a ponerse más aguda y entrenada.
Me pidieron que escribiera sobre la escritura y luego sobre Feng Shui por separado. Pero mi mente me dijo otra cosa. Se mezcló ambos temas. Yo nunca discuto con mi intuición, ella sabe más. Yo soy un ser integral y complejo.
Soy diseñadora y escritora, madre y abuela. Soy una chica todopoderosa, una criatura mágica, una Diosa.